Tipos de fachadas que puede tener un edificio
Un edificio tiene infinidad de componentes interiores y exteriores cuyo fin es que la estructura funcione correctamente. Además de los elementos básicos que mantienen en pie la construcción y la cubierta, la fachada arquitectónica hace su función como barrera para que el edificio en sí no se dañe.
La fachada es el elemento más externo de un edificio, el conjunto de caras que tiene la construcción. Este componente es el cerramiento o cierre vertical que envuelve la estructura.
La principal función de la fachada de un edificio, al ser el elemento exterior del mismo, es protegerlo y aislarlo de los factores climatológicos (sol, lluvia, nieve, viento…) que pudieran afectar al resto de componentes del edificio. Esta función hace que cobre una gran importancia para reducir los costes de mantenimiento y consumo, por eso es tan importante elegir bien entre los diferentes tipos de fachadas que puede tener un edificio.
Tipos de fachadas para casas
Como es uno de los elementos más importantes de una construcción, vamos a conocer los tipos de fachadas y modelos de fachadas de edificios, su función y las características de una fachada para poder comprobar las diferencias:
Fachada ligera
Este tipo de fachada consiste en un sistema adherido a la estructura de la vivienda sin formar parte de ella. Las opciones de materiales son diversas aunque normalmente suelen ser de cristal o metal y esto hace que sea fácil de instalar. Las fachadas ligeras potencian la luminosidad del interior del edificio y propician el ahorro de energía, aunque cuentan con un peor aislamiento térmico y acústico y unos costes de mantenimiento a medio plazo más altos que otras alternativas.
Existen dos tipos de fachada ligera: fachada panel (cortada en casa forjado) y muro cortina (continuado). Ambos coinciden en que el aislamiento no es su fuerte y en que el mantenimiento suele ser costoso. La principal diferencia entre ambos es que el muro cortina es fino y no le aporta cargas al edificio, mientras que la fachada panel recubre la pared con paneles situados muy cerca unos de otros.
Ventajas de las fachadas ligeras:
- Las fachadas ligeras son fáciles de instalar
- Potencian la luminosidad del interior del edificio
- Propician el ahorro de energía.
- Es recomendado para edificios de mediana o gran altura, normalmente edificios de oficinas
- Sistema constructivo industrializado, por lo que el desarrollo de la obra es rápido
Fachada pesada
Las fachadas pesadas son todas aquellas que cuyo peso supera los 100 kilogramos por cada metro cuadrado.
Fachada con sistema SATE
La fachada SATE (Sistema de Aislamiento Térmico por el Exterior) se basa en la colocación de planchas de aislamiento sobre la fachada original para terminar con un revestimiento decorativo. Para ello es necesario la colocación de paneles aislantes fijados mecánicamente sobre la superficie actual de su cerramiento.
Este cerramiento sin puentes térmicos garantiza un estupendo aislamiento térmico y acústico ideal para mejorar la eficiencia energética y para solucionar problemas de humedades de fachadas tradicionales. Existen distintos materiales aislantes (espuma, fibra de madera, lana mineral, poliestireno…) y es un sistema muy cómodo de instalar ya que no causa molestias en el interior del edificio.
Un sistema que cumple toda la normativa a nivel europeo y estatal, en cuanto a exigencias de protección contra el fuego, salubridad y eficiencia energética se refiere. Normativas que según avanzamos en el tiempo, son cada vez más exigentes a nivel de requisitos de eficiencia térmica, por lo que la puesta en obra del sistema SATE es una gran opción para poder cumplir cada una de ellas.
El sistema SATE debe ser aplicado por empresas homologadas y especializadas, ya que existen unos pasos, recomendaciones y obligaciones para garantizar el funcionamiento de dichos sistemas.
Ventajas del sistema de fachada SATE
- Reducción de costes en la ejecución de la envolvente térmica.
- Intervención por el exterior de la vivienda, con mínimas molestias a sus ocupantes.
- Alta relación calidad / precio del sistema.
- Gran impermeabilidad de la solución.
- Sistema transpirable, abierto a la difusión de agua.
- Ahorro energético.
- Mejora de la acústica.
- Es valido tanto para una fachada de vivienda unifamiliar como para un edificio.
- Inversión recuperable a medio plazo de la inversión realizada.
- Confort térmico en el interior de las estancias de la vivienda.
- Prevención de formación de moho en interiores.
- Eliminación de puentes térmicos.
- Diseño y modelado con gran variedad de colores y texturas.
Fachada Prefabricada
Las fachadas para casas prefabricadas están compuestas por elementos fabricados previamente que se ensamblan sobre la obra del edificio.
Son habituales en grandes construcciones como fábricas o centros comerciales y no tan frecuente en viviendas, ya que necesitan un volumen suficiente para que sea viable. Los materiales más usados son el acero, el hormigón armado y prensado, el aluminio, etc.
Ventajas de las fechadas prefabricadas
- Son fachadas muy duraderas y resistentes
- Es un tipo de fachada fácil y rápida de instalar
- Son totalmente impermeables
- Son mucho más ligeras que otros sistemas.
- Buen aislamiento acústico
Fachada Tradicional
Las fachadas tradicionales son aquellas en las que predominan los materiales típicos de las construcciones antiguas: piedra, madera, ladrillo y recubrimiento de cemento.
Este tipo de fachadas tienen un coste menor respecto de los otros tipos de fachadas, ya que el coste de estos materiales es inferior a los más modernos, pero no tiene un buen aislamiento término pese a contar con una pequeña cámara de aire y varias capas de materiales y revestimiento, por lo que los puentes térmicos y las pérdidas de calor son comunes en estos casos, por lo que son muchos menos eficientes respecto de las fachadas que cuentan con el sistema SATE.
Fachada Ventilada
También conocida como fachada transventilada, este tipo de fachada es una de las más populares y está compuesta por un muro de soporte, una capa aislante con cámara de aire y un revestimiento fijado con una estructura portante.
Esa cámara de aire es la que convierte a este tipo de fachada en una opción muy eficiente tanto en consumo energético como en desperfectos (menos grietas, fisuras, filtraciones, condensación…), evitando la humedad y condensación y mejorando el aislamiento térmico y acústico.
El Sistema de aislamiento para fachadas ventiladas consiste en la colocación de aislamiento por el exterior dejando una cámara de aire entre el aislamiento y la fachada original, lo que servirá como aislante y la protegerá de las inclemencias meteorológicas.
La fachada ventilada es más compleja de instalar en cuanto a puesta en obra se refiere y tiene un coste superior al sistema SATE, ya que, para ello, es necesario el montaje de una estructura auxiliar para las fijaciones sustentadoras del acabado final, las cuales deberán ir aplomadas a la perfección. También es importante realizar correctamente la instalación para evitar los posibles puentes térmicos que se pueden originar debido a los anclajes del sistema de fijación de la fachada.
